Textos pequeños pero concentrados.
Parpadeo los miércoles de mañana y desaparece mi amante. ¡Suerte que vuelve! Es un desaparecer "poco".
Desaparecemos varias veces por minuto. Y cada vez reaparecemos. Por eso tenemos fe.
Bellísima su idea expresada en tan sólo cinco palabras.
Cuando desaparezco tú no desapareces.
Los párpados caen y se incorporan tan rápido, que es una maravilla su ejemplo de recuperación.
Desaparecer siempre. Asistir siempre a las desapariciones. Festejar las fechas con desaparecidos. Es como vivir con fantasmas.
No parpadees. Cierra los ojos un momento. Entretanto yo apareceré en otro lado. Tú me buscarás. Yo te buscaré. Y estaremos juntos.
¨Si me voy antes que vos, si es así que está dispuesto¨, ¨recuérdame en mi mejor vez. La espina no. La flor, si es que hubo flor¨.
Cuando cierres los ojos y me recuerdes un instante, suéñame a tu lado, que tu sueño me conducirá a ti.
Parpadear es menos serio que cerrar los ojos.
Cada vez que desapareces un poco, vuelves con más fuerza.
¨Yo adivino el parpadeo de las luces que a lo lejos van marcando mi retorno¨, por eso abro atentos los ojos, para que la luz me muestre por donde ir.
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12 comentarios:
Parpadeo los miércoles de mañana y desaparece mi amante. ¡Suerte que vuelve! Es un desaparecer "poco".
Desaparecemos varias veces por minuto. Y cada vez reaparecemos. Por eso tenemos fe.
Bellísima su idea expresada en tan sólo cinco palabras.
Cuando desaparezco tú no desapareces.
Los párpados caen y se incorporan tan rápido, que es una maravilla su ejemplo de recuperación.
Desaparecer siempre. Asistir siempre a las desapariciones. Festejar las fechas con desaparecidos.
Es como vivir con fantasmas.
No parpadees. Cierra los ojos un momento. Entretanto yo apareceré en otro lado. Tú me buscarás. Yo te buscaré. Y estaremos juntos.
¨Si me voy antes que vos, si es así que está dispuesto¨, ¨recuérdame en mi mejor vez.
La espina no. La flor, si es que hubo flor¨.
Cuando cierres los ojos y me recuerdes un instante, suéñame a tu lado, que tu sueño me conducirá a ti.
Parpadear es menos serio que cerrar los ojos.
Cada vez que desapareces un poco, vuelves con más fuerza.
¨Yo adivino el parpadeo de las luces que a lo lejos van marcando mi retorno¨, por eso abro atentos los ojos, para que la luz me muestre por donde ir.
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