miércoles, 11 de julio de 2012

Significante Nº 1.239


Los adultos no les hacemos regalos a nuestros niños: los indemnizamos.

11 comentarios:

John dijo...

Y es así como los niños se inician en el largo camino del consumismo que ¿sin querer? les fomentan sus señores padres.

Rita dijo...

Verdaderamente nuestros niños son a prueba de balas. No hay indemnización suficiente que les calme el dolor que les hemos causado.

Susana dijo...

Los niños aprenden a indemnizar más o menos a partir del primer año de vida. Mucho antes de regalar la caquita.

Gabriela dijo...

Finalmente ud me ha convencido. No deberíamos hacer regalos. Mucho menos a nuestros hijos.
Los únicos regalos verdaderos son los que nos procuramos nosotros mismos.
Igual... un regalito de vez en cuando se puede soportar...

Natalia dijo...

No señor. Yo no puedo vivir en el ostracismo de mi propia cultura.

Carolina dijo...

Ud. tiene montones y montones de frases geniales!!!

jajaja!!! le hice un regalo :b

Marcos dijo...

Ya los niños son inmunes a los regalos. No los indemnizamos nada. Seguirán el juicio hasta el final de nuestros días.

Rosaura dijo...

Mi hijo no se deja indemnizar. Recibe la paga y vuelve a reclamar.
Qué hice yo, para merecer esto?!

Alicia dijo...

Los niños demandantes están reclamando algo importante que les falta. Busquemos -y ayudémoslos a buscar- qué les falta.

Alba dijo...

A veces creo que les faltan límites, pero también puede ser que les falte amor, tiempo, comprensión, tolerancia.

Leonardo dijo...

Ahora se viene el día del padre.
Aprovechemos.
Ellos o nuestra esposa, se encargarán de resarcirnos ahora.