Tengo un stock de enemigos que colaboran con mi autocrítica.
11 comentarios:
Anónimo
dijo...
Yo criticaba a mi padre por la cantidad de gente en contra que conseguía (es un político regional retirado) y ahora veo que la refriega social tiene aportes muy valiosos que los amigos no nos dan.
En los regímenes democráticos le llamamos oposición, con la salvedad de que ellos hacen toda la crítica y el partido de gobierno cambia la autocrítica por la ponderación. Les gusta "rendir cuentas al pueblo" de todo la bueno que han hecho.
11 comentarios:
Yo criticaba a mi padre por la cantidad de gente en contra que conseguía (es un político regional retirado) y ahora veo que la refriega social tiene aportes muy valiosos que los amigos no nos dan.
A mi no me gusta tener enemigos porque mucho menos me gusta la crítica.
Sólo acepto adulones o similares. Sólo tolero alabanzas o similares. Sólo presto atención a piropos o similares.
Masoquistas: abstenerse.
Las críticas más serias me las han hecho siempre mis amigos.
A las críticas de los enemigos hay que filtrarlas como al café.
Yo tengo un stock de calzoncillos que colabora con mi pereza.
Reconozco que soy muy autocrítico. Los autos ya no vienen como antes.
No se puede quejar! son enemigos que colaboran!
En los regímenes democráticos le llamamos oposición, con la salvedad de que ellos hacen toda la crítica y el partido de gobierno cambia la autocrítica por la ponderación. Les gusta "rendir cuentas al pueblo" de todo la bueno que han hecho.
Ya que desean colaborar, pídale a sus enemigos que colaboren ocupándose de otra cosa.
En la peluquería nos reunimos un stock de amigas que practica la hetero-crítica.
Publicar un comentario