martes, 24 de marzo de 2009

Significante Nº 318

Tengo un stock de enemigos que colaboran con mi autocrítica.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo criticaba a mi padre por la cantidad de gente en contra que conseguía (es un político regional retirado) y ahora veo que la refriega social tiene aportes muy valiosos que los amigos no nos dan.

Anónimo dijo...

A mi no me gusta tener enemigos porque mucho menos me gusta la crítica.

Anónimo dijo...

Sólo acepto adulones o similares. Sólo tolero alabanzas o similares. Sólo presto atención a piropos o similares.

Masoquistas: abstenerse.

Anónimo dijo...

Las críticas más serias me las han hecho siempre mis amigos.

Anónimo dijo...

A las críticas de los enemigos hay que filtrarlas como al café.

Anónimo dijo...

Yo tengo un stock de calzoncillos que colabora con mi pereza.

Anónimo dijo...

Reconozco que soy muy autocrítico. Los autos ya no vienen como antes.

Anónimo dijo...

No se puede quejar! son enemigos que colaboran!

Anónimo dijo...

En los regímenes democráticos le llamamos oposición, con la salvedad de que ellos hacen toda la crítica y el partido de gobierno cambia la autocrítica por la ponderación. Les gusta "rendir cuentas al pueblo" de todo la bueno que han hecho.

Anónimo dijo...

Ya que desean colaborar, pídale a sus enemigos que colaboren ocupándose de otra cosa.

Anónimo dijo...

En la peluquería nos reunimos un stock de amigas que practica la hetero-crítica.