sábado, 10 de septiembre de 2011

Significante Nº 1.014

El violín, siempre tenso, envidia la serenidad del contrabajo y este daría cualquier cosa para que lo dejaran viajar en ómnibus.

7 comentarios:

Rosana dijo...

No nos conformamos con lo que nos toca porque alentamos la esperanza de que la otra realidad, la desconocida, sea mejor.

Anónimo dijo...

Lo que más le envidia el violín al contrabajo es su terrible lomo.

Néstor dijo...

El violín y el contrabajo son tan femeninos como la viola. Su identidad masculina los tiene contrariados.

Nazareth Inglese dijo...

Con gran trabajo
el contrabajo
se metió
entre el equipaje
de abajo.
Así viajó
en colectivo;
el violín dice
que se hizo el vivo.

el poeta dijo...

Si el contrabajo
hablara con la mochila,
sabría que viajar en ómnibus
es una porquería.

Líber dijo...

Entre el contrabajo y el ómnibus hay un amor imposible. Tan imposible como el del elefante y la hormiga, la mariposa y el picaflor, el vino y la sandía.

Rulo dijo...

El violín se tensiona porque teme que lo confundan con el recipiente tocayo.