Cuando vendía libros en la avenida, me iba apenas vendía uno. Y si ese día no se vendía nada, me ponía como hora límite las 20, porque a esa hora salía una muchacha preciosa de un edificio que quedaba enfrente.
Si Emma es una persona de oro, debería cerrar la librería y ponerse a vender joyas; seguro que eso iría más de acuerdo a su personalidad. Dicen que los nombres nos definen.
Los anarquistas tenemos una vida peligrosa y llena de emociones e imprevistos. Cuando nos vamos nunca sabemos si llegaremos. Asimismo, cuando llegamos no sabemos si luego podremos irnos.
13 comentarios:
Me abro al saber para confirmar una certeza y me cierro para desterrar una duda.
Cuando vendía libros en la avenida, me iba apenas vendía uno. Y si ese día no se vendía nada, me ponía como hora límite las 20, porque a esa hora salía una muchacha preciosa de un edificio que quedaba enfrente.
Me imagino que esos serían tiempos duros, Rulo...
No, me bancaban mis viejos.
Que sean anarquistas no quiere decir que no sepan usar las puertas!!
No Paty! quiere decir que abren y cierran a cualquier hora!
Si Emma es una persona de oro, debería cerrar la librería y ponerse a vender joyas; seguro que eso iría más de acuerdo a su personalidad. Dicen que los nombres nos definen.
A mí me definen los hombres.
En la librería anarquista te venden el libro que te toque en suerte.
En realidad siempre queda algún compañero en el local fabricando alguna bomba. Son tradiciones...
La filosofía de Cristal es anti-sabiduría.
Y a veces no abren porque no encuentran la llave.
Los anarquistas tenemos una vida peligrosa y llena de emociones e imprevistos. Cuando nos vamos nunca sabemos si llegaremos. Asimismo, cuando llegamos no sabemos si luego podremos irnos.
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