Negar la realidad te puede convertir en un tipo muy entusiasta y a prueba de balas. Si mantenés ese mecanismo puede que no te desalientes nunca, y en algún momento se te va a dar que las cosas resulten bien.
¿Por qué la nariz de elfante? ¿Será porque dicen que los elefantes tienen mucha memoria? ¿Será para olvidar tomándose unas cuantas copas? En ese caso, ¿por cuánto tiempo lográs olvidar?, y cuando recobrás la lucidez... tendrás que volver a tomar, supongo.
En casos como el que menciona Eugenia, tomar te puede ayudar por un tiempo, el tiempo necesario para procesar el dolor que querés anesteciar. Luego podés dejar de tomar, no quiere decir necesariamente que te vas a convertir en un alcohólico, aunque claro, quedás expuesto a que eso suceda.
El problema es que debilitar la lucidez o negar la realidad (sobre todo esta última), son procesos que se realizan de manera inconsciente. En esos casos necesitás que alguien te lo haga ver, de manera cuidadosa.
Nunca sabés que reacción van a tener los que te rodean si negás la realidad. POdés llegar a resultar insoportable, o simpático; depende de los ojos que te miren.
Puede que el instinto de conservación te lleve a negar la realidad. Aunque también puede suceder lo mismo con el debilitamiento de la lucidez. Como el instinto de conservación nos empuja, ambas soluciones pueden ser necesarias. Sobreviviendo existe la posibilidad de que puedas, en algún momento, salir adelante.
Algunos
sobrevivimos negando la realidad y otros debilitando la lucidez. 
14 comentarios:
Ninguna de las dos cosas parece demasiado conveniente. O mas bien, ambas cosas se parecen demasiado.
Si la lucidez se debilita con alcohol, como sugiere la foto, me parece mejor negar la realidad.
Negar la realidad te puede convertir en un tipo muy entusiasta y a prueba de balas. Si mantenés ese mecanismo puede que no te desalientes nunca, y en algún momento se te va a dar que las cosas resulten bien.
Debilitar la lucidez lleva a que te consideren un tonto, entonces terminarás sintiéndote un tonto y llevarás una vida tonta.
¿Por qué la nariz de elfante? ¿Será porque dicen que los elefantes tienen mucha memoria? ¿Será para olvidar tomándose unas cuantas copas? En ese caso, ¿por cuánto tiempo lográs olvidar?, y cuando recobrás la lucidez... tendrás que volver a tomar, supongo.
En casos como el que menciona Eugenia, tomar te puede ayudar por un tiempo, el tiempo necesario para procesar el dolor que querés anesteciar. Luego podés dejar de tomar, no quiere decir necesariamente que te vas a convertir en un alcohólico, aunque claro, quedás expuesto a que eso suceda.
Si tomás capaz que el proceso de asimilación de lo que te está pasando, se hace más lento, aunque más llevadero. Te puede salvar del suicidio.
Una mente poco lúcida puede negar la realidad, sobre todo si ese es el estado que ha acompañado a la persona la mayor parte de su vida.
El problema es que debilitar la lucidez o negar la realidad (sobre todo esta última), son procesos que se realizan de manera inconsciente. En esos casos necesitás que alguien te lo haga ver, de manera cuidadosa.
Las personas poco lúcidas son, muchas veces, más felices que las que poseen una gran lucidez.
Nunca sabés que reacción van a tener los que te rodean si negás la realidad. POdés llegar a resultar insoportable, o simpático; depende de los ojos que te miren.
En estado de demencia negar la realidad puede considerarse, desde el punto de vista psicoanalítico, un efectivo mecanismo de defensa.
Puede que el instinto de conservación te lleve a negar la realidad. Aunque también puede suceder lo mismo con el debilitamiento de la lucidez. Como el instinto de conservación nos empuja, ambas soluciones pueden ser necesarias. Sobreviviendo existe la posibilidad de que puedas, en algún momento, salir adelante.
Creo que es más fácil negar la realidad que debilitar la lucidez.
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