jueves, 28 de marzo de 2013

Significante Nº 1.444


15 ideas brevísimas, filosóficas, sarcásticas, humorísticas, más la música de Le Freak interpretada por Chic.

15 comentarios:

Gabriela dijo...

Le comento la primer idea: yo mujer quiero ser poseedora de un hombre, de un hijo, de dinero, etc. Es cierto. Pero por otro lado sé que no puedo poseer a nadie, porque las personas no son objetos. También sé que tener un compañero no implica necesariamente tener dinero y no es eso lo que busco cuando tengo un compañero. Entonces, tomo nota de lo que dice la frase, puede ser parte de mis deseos inconfesables. Son inconfesables porque no pueden ni deben llevarse a la práctica, y de hecho yo no lo hago.

Elena dijo...

Me resulta más fácil amar a los semejantes que son bien parecidos a mí. Aunque también es justo decir que por más parecidos que sean distan mucho de ser idénticos, y esas diferencias que a primera vista pueden parecer sutiles, en realidad no lo son y exigen un gran esfuerzo de comprensión y tolerancia para mantener los vínculos.

Javier dijo...

Voy por la 3er frase. Ante la muerte todo se distorsiona. Los sentimientos quedan a flor de piel. Si es un ser querido se llora nuestra pérdida. Si es alguien que no nos importa demasiado se llora la propia muerte futura. Lo que es ineludible es sufrir por nosotros mismos, salvo cuando quien sufre la pérdida es un ser querido nuestro. Si mi compañera perdiera a su mejor amiga, o a uno de sus padres, me generaría dolor porque me pondría en su lugar. Me generaría dolor por empatía. Es decir que el dolor provendría de imaginarme yo en su situación. De todos modos eso no significa, desde mi punto de vista egoísmo. Egoísmo sería la consecuencia de no poder empatizar.

Ernesto dijo...

En la cuarta frase se dice que la verdad es la creencia de la mayoría y que creencia es la verdad de la minoría. Muy ingenioso y cierto. Así lo percibimos, por más que la historia nos ha demostrado sobradas veces lo contrario.

Laura dijo...

En cuanto a que un tonto defiende sus creencias como si fueran verdades, yo diría: más que un tonto es una persona que por su inseguridad cae en la soberbia.

Hugo dijo...

jajaja!!!!!!!!! La longevidad es perjudicial para la salud, de eso no cabe duda, ¿pero quién no sueña con una vida larga y saludable? ... Y una muerte rápida.

Margarita dijo...

La familia biológica no la elegimos, tampoco la familia que nos adopta, dado el caso.
Cuando elegimos una familia al casarnos y por tanto llevamos a nuestra familia al doble o al triple, corremos grandes riesgos. Podemos llegar al borde de la desesperación y terminar incluso rompiendo con todo, con la familia que teníamos y con la nueva familia aportada con nuestro cónyuge. Por suerte a veces no se da así. A veces de verdad la suegra gana un hijo o una hija, y se ganan sobrinos, tíos y todo eso. La nueva familia puede aportarnos parte de lo que nuestra familia de origen no nos aportó.

Damián dijo...

Probablemente los delincuentes que no se arrepienten son honestos y fieles a si mismos, aunque a nosotros nos parezca un horror lo que hacen y piensan. Creo que es una situación imposible de manejar.

Evangelina dijo...

Quien cree que nació pecador hará todo lo posible para dejar de serlo, o serlo lo menos posible. En cambio para quien cree haber nacido puro, le resultará difícil aceptar que la vida lo ha vuelto un ser... complicado.

Anónimo dijo...

A los niños hay que disfrutarlos, sí, mientras la salud te lo permita.

Olga dijo...

Las mujeres que se enamoran de hombres mucho mayores lo hacen a sabiendas de que lo más probable es que los pierdan, los lloren y los extrañen toda la vida.
La mayoría de las personas cree que esos matrimonios se dan por interés. En muchos casos es así. Pero pagan justos por pecadores.

Mariana dijo...

Me gusta esto de las 15 ideas breves. Me llamó la atención la que dice: a un ignorante crónico se lo reconoce porque no puede aprender de sus errores, en tanto siempre los considera ajenos.
¡Cuántas veces me ha pasado eso!
Honestamente demasiadas.
Y después pienso que voy a crecer si leo libros de auto-ayuda o voy a psicoterapia. No sé si fue que di con un mal terapeuta o si los libros de auto-ayuda eran demasiado voluntaristas, lo cierto es que no me ayudaron demasiado. Particularmente con la terapia lo que me pasó es que nunca pude decir la verdad frente a mi terapeuta, nunca pude confiar en él, y lo peor es que no me daba cuenta. La primera vez que pude asociar libremente y decir la primer barbaridad que se me vino a la cabeza fue con un amigo. Este amigo del que les hablo es un soldado, un tipo de fierro. Diga lo que diga el sigue allí. ¡Nunca salió corriendo! Nunca me juzgó ni me miró con asco.
Por experiencia personal llego a la siguiente conclusión: para no echarle la culpa a los demás de lo que nos pasa y hacernos responsables de nuestra vida, tenemos que estar preparados. De nada sirve un psicólogo, un libro o un amigo, si no llegan en el momento justo. Yo tuve la suerte de encontrar un amigo que me permitió mirarme en el espejo, en el momento que era capaz de hacerlo.

Estela dijo...

si los ladrones se llevaran mis recuerdos estaría muy, muy triste. Hay un ladrón muy especial que sí puede hacerlo; el conocido señor Alzheimer. El consuelo es que en ese caso sufriré al principio, pero luego ya no me daré cuenta.

Yoel dijo...

Cuando los médicos se enferman no van al médico y sospecho que tampoco recurren a todo lo que saben.

Blanca dijo...

¡Las parejas explosivas! Todo un peligro. Yo soy de las que busca el empate o le deja ganar al otro... mas bien le dejo ganar al otro. Eso igual a la larga tiene sus costos. Así que no hay recetas, sólo intentar no llegar a la violencia verbal o física.