Todas admiran el rostro de Julián y aunque le sugieren labial, sombra o rímel, él insiste con aumentar el bulto del pantalón.
12 comentarios:
Carmen
dijo...
Me encantó el texto y la imagen! Me atrevo a confesar que despiertan, ambos, en mí, los desoes mejor guardados de mis años como "señora seria". Ahora, soy "animal vivo", es decir, mujer que se conoce, que se respeta, que se disfruta.
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Me encantó el texto y la imagen! Me atrevo a confesar que despiertan, ambos, en mí, los desoes mejor guardados de mis años como "señora seria". Ahora, soy "animal vivo", es decir, mujer que se conoce, que se respeta, que se disfruta.
Nosotras sabemos mejor que ellos cuales son las partes del cuerpo que se deben destacar.
Por favor! no dividan el mundo en ellas y ellos. La realidad es más interesante y variada que esa dicotomía falsa.
Formo parte de la minoría que no encuentra en qué embellece el maquillaje.
Al fin aparecieron las sexólogas que niegan lo que los sexólogos pretendían ocultar: el tamaño importa!!!
Bueno, no importa sólo el tamaño, también importa la belleza de la forma, la potencia, y la destreza en el uso.
Que lo parió! Sí que saben meter presión.
No creo que sea una buena opción si lo que se quiere es escapar de la ciclotimia...
Entiendo que todas admiren el rostro de Julián; lo que me choca un poco es que se lo admire tanto él mismo.
Los muchachos de antes no usaban cosméticos...
Un hombre intentando destacar la belleza de su rostro pero sin querer parecerse a una mujer, es algo poco común.
No se da cuenta que alcanza con lo que es, no necesita destacar nada.
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