lunes, 18 de julio de 2011

Significante Nº 969

Mi padre sabía, me lo dijo y pude comprobarlo: La muerte elige a sus clientes entre quienes asisten a los velorios.

15 comentarios:

Norton dijo...

La muerte no precisa buscar clientes. Todos nacemos asociados.

Facundo Negri dijo...

En realidad la vida puede resumirse como un gran velorio: todos acompañamos a los que siguen vivos.

Renata dijo...

Es que a la muerte le gustan todos aquellos que admiran su obra.

Mirna dijo...

La muerte no tiene elegidos; nos gobierna de una forma inexorablemente democrática.

Lautaro dijo...

Claro, porque el que va al velorio tienta a la muerte. Sobre todo si cuenta chistes.

Yoel dijo...

La muerte prefiere a los jóvenes, por eso siempre está atenta a los accidentes de tránsito.

Marina López dijo...

Algunos prefieren morirse antes que jurar la Constitución.

Lucas dijo...

Creí que era un velorio, o una macumba, o un casamiento, o una fiesta de quince. No; era Iemanyá.

Morgana dijo...

La muerte pasa lista en los velorios y siempre hay un distraído que no dice presente.

Clarisa dijo...

Desde que está de moda el violeta, he sentido un gran alivio de luto.

Joe Black dijo...

Los clientes de la muerte no gastan.

Ernesto dijo...

La muerte encuentra a sus deudores entre quienes arriesgan su vida.

Olegario dijo...

Mi padre no lo sabía, ni me lo dijo, así que asistí a los velorios sin hacerme ningún problema.

Horacio dijo...

A medida que se eleva la esperanza de vida, la muerte se ve obligada a mostrar sus caras más crueles y perversas. Anda rondando entre viejos postrados y lentas agonías.

Evaristo dijo...

A la muerte no le gusta que se le distraigan. Varias veces ha saboteado la producción de morfina.