jueves, 22 de abril de 2010

Significante Nº 625

Quiero que seas sincera conmigo pero, ¡cuidado con lo que me vas a decir!

5 comentarios:

Mendivez dijo...

Bancarse la sinceridad ajena es toda una proesa, en cambio, espetar con sinceridad nuestro pensamiento, puede ser una puñalada trapera.

Sofía dijo...

Mi sinceridad termina donde empieza la cara de espanto de los demás.

Rosario dijo...

Hay que tener cuidado con lo que se dice cuando se es sincera porque no se trata de herir al otro; salvo que una aliente oscuras intenciones.

Celina dijo...

No importa lo que yo quiera; sólo te pido mucho cuidado con lo que me vas a decir (esa sería una lectura más adecuada).

ella dijo...

Ese estilo ambivalente que adoptas conmigo, me deja confusa y sin rumbo.