martes, 26 de febrero de 2013

Significante Nº 1.415



Basta observar lo que ocurre en cualquier pueblo para darse cuenta que Dios y el Diablo son amigos y que van a todos lados juntos.

15 comentarios:

Mª Eugenia dijo...

¿Amigos? ¿En qué sentido? Usted siempre nos hace pensar! y después de haber trabajado todo el día ta difícil...

Paolo dijo...

De pronto lo que quiere decir el Licenciado es que para definir el bien necesitamos la existencia del mal y viceversa.

Lucas dijo...

Van a todos lados porque nada ni nadie es completamente bueno o completamente malo.

Gabriela dijo...

Lo que dice Lucas es muy fácil de comprender pero difícil de asumir.

Graciana dijo...

Salta a la vista que Dios es más lindo porque es más parecido a nosotros.

Soraya dijo...

En cualquier pueblo lo que ocurre es que el bien y el mal andan codeándose con todo el mundo.

Marianela dijo...

El Diablo parece más musculoso que Dios. ¿Le ganará la pulseada? Mmmm... parece que no, porque Dios cuenta con una luz y una serenidad que da confianza. Yo le apostaría a Dios.

Ernesto dijo...

A juzgar por el color de la piel, el Diablo es tercermundista y Dios... bueno ya sabemos.

Martín dijo...

¿Por qué el Diablo es cornudo? ¿Quién lo traiciona?

Leticia dijo...

No le pongan orejas de duende al Diablo. Adoro a los duendes y no me los imagino malignos.

Selva dijo...

No sé de dónde salió esta frase: ¨El mal es el descanso del bien; todos pertenecemos al bien. Todos¨.
Lo que no entiendo es por qué el bien necesita descansar. Se supone que el bien reanima. Debe tener mucha fuerza.

Jacinto dijo...

El Diablo tiene cuernos porque es más animal que nosotros. Embiste como un toro. Se enfurece. Vive en el calor abrazador del fuego.

Yoel dijo...

si dios es todo, necesariamente tiene que incluir al mal; ¿o el mal es una creación exclusivamente humana?
disculpen mi ignorancia.

Luján dijo...

Hay una diferencia fundamental entre el bien y el mal. Contra el mal se lucha. Al bien se lo alienta.

Carlos dijo...

Depende Luján. También se lucha por el bien y se alienta el mal. Todo depende de lo que mires, o mejor, de lo que quieras ver.