Son curables todos aquellos pacientes que sobreviven al tratamiento.
12 comentarios:
Jorge
dijo...
Me obligan a estudiar medicina y a veces te leo para ver si me das alguna idea que me permita defenderme de esto que no me gusta. Yo sólo quiero cantar.
Yo estudio medicina por vocación, mi situación es la opuesta a la de Jorge. Deseo servir a la comunidad brindando asistencia, aliviando el dolor, perpetuando la vida. Todas las ironías que usted escribe sobre los médicos y la medicina, me hieren profundamente.
12 comentarios:
Me obligan a estudiar medicina y a veces te leo para ver si me das alguna idea que me permita defenderme de esto que no me gusta. Yo sólo quiero cantar.
Yo estudio medicina por vocación, mi situación es la opuesta a la de Jorge. Deseo servir a la comunidad brindando asistencia, aliviando el dolor, perpetuando la vida. Todas las ironías que usted escribe sobre los médicos y la medicina, me hieren profundamente.
Hay que aprender a reírse de uno mismo, Adriana.
Soy creyente. Sé que algún día me curaré en el Cielo.
Mi familia y mis amigos dicen que la quedé en la sala de operaciones, pero en realidad a mí lo único que me pasó es que me volví invisible.
Morí en el tratamiento y resucité en el sobretodo de madera. No se lo deseo a nadie.
Por ahora soy curable pero este tratamiento me está tratando muy mal. Miento si les digo que me siento mejor.
Para sobrevivir a un tratamiento no se puede ser paciente; hay que ser montonero y anarquista.
Ahora entiendo por qué los médicos se cubren la cara igual que los homicidas.
Si la condición para sobrevivir es pasar al Reino Vegetal, espero que mi familia tenga la cordura suficiente.
Detrás de cada cirujano hay un carnicero de alta precisión.
A los médicos, igual que a los niños, hay que decirles lo que ellos están en condiciones de oír.
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