domingo, 1 de febrero de 2009

Significante Nº 278

Tu dices que mi cuñada dijo eso de mí, pero yo lo escucho dicho por tí.

14 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué cinismo y tiene razón. A veces los correveidile son autores de sus habladurías. Gran puntualización la suya. Bien, bien!!

Anónimo dijo...

He leído libros enteros que no me han entregado una idea tan valiosa como ésta.

Gracias y saludos para todos.

Anónimo dijo...

Es cierto, si alguien no estuviera de acuerdo con lo que otro dijo de nosotros, es probable que no le diera importancia y hasta lo olvidaría. El recordarlo confirma que también lo cree. ¡Ojo con los y las confidentes! Son espías dobles.

Anónimo dijo...

Las intenciones del portavoz son de las más variadas.

Anónimo dijo...

Hizo bien en ilustrar la frase con dos mujeres. Esos quilombetes los arman las minas. Los hombres no somos ningunos santos, pero ese tipo de cosas no hacemos.

Anónimo dijo...

Poner a "las minas", como dice el sr. Yamandú, todas en una misma bolsa, sí que es típico de los hombres. No tienen sensibilidad ni inteligencia para apreciar las diferencias.

Anónimo dijo...

Que digan lo que quieran. Las palabras no me detienen.

Anónimo dijo...

No sé por qué cuñadas y suegras tienen tan mala fama. A mí por suerte me tocaron siempre buenas.

Anónimo dijo...

Los chismes son una enfermedad dañina. Por principio soy muy dura con quien me viene con uno. (Ojo, igual los escucho por las dudas)

Anónimo dijo...

¡Y qué quiere esa mujer! ¡Que traiga de los pelos a confesar a la cuñada!

Anónimo dijo...

A esa chismosa le cortaron el rostro!

Anónimo dijo...

Para la próxima que haga bien el trabajo: grabe a su cuñada.

Anónimo dijo...

¡Y qué quiere si la cuñada es muda!

Anónimo dijo...

Lo mejor es decir: no sé, no ví, no estaba.Cada cual que se ocupe de sus cuñadas/cuñados!.