jueves, 26 de mayo de 2011

Significante Nº 925

Ya que no puedo ser asediada por mi belleza y secuestrada por mis adoradores, que me persigan quienes me odian. Algo haré para acomodar los hechos a mis fantasías.

10 comentarios:

Alicia dijo...

Es probable que usen un mecanismo similar los niños y adolescentes agresivos, excesivamente rebeldes. Quizás sientan que no son queridos por sus padres, y buscan ser odiados para lograr que sientan algo fuerte por ellos.

Gabriela dijo...

Una fantasía que afecta a millones de personas es lograr ser centro de interés. Es lo que llamamos 'fama'. Buscar denodadamente la fama es un impulso que se manifiesta a través de la búsqueda del asedio de periodistas y público. Muchos necesitan que otros hurguen en su vida privada, que los persigan, fotografíen, opinen sobre sus vidas.
Creo que todo eso no es más que necesidad de afecto y reafirmación. Las personas que parecen más orgullosas y seguras de si mismas, probablemente luchen diariamente contra distintas manifestaciones de la pobreza.

Marcia dijo...

Hasta los 30 años que me adoren.
Después de los 30, que me odien.

Manuel dijo...

La cámara que enfoca a esa chica no tiene corazón.

Lucas dijo...

La clave para ser feliz es acomodar los hechos a las fantasías. Pena que luego el método hace agua, porque para lograrlo uno paga el costo de quedarse ciego.

Filisbino dijo...

Los que tienen sed de mí, me asedian día y noche.
Pobre del que tenga sed de justicia.

Ma. Eugenia dijo...

Sed de justicia o sed de venganza, Filisbino?
Como planteaba Fernando en uno de sus artículos; cuál es exactamente la diferencia entre ellas?

la gordis dijo...

Lo que existe no es la injusticia, sino lo injusto. Injusto es por ejemplo, que algunas tengan tanta belleza y otras tengamos tan poca.
Eso es lo que yo pienso, Euge.

Paulo dijo...

A la Madre Teresa la asediaban por su belleza interior... o era por los intereses políticos de la iglesia?

Teresinha dijo...

Belleza interior Paulo, tenemos todos los que estamos razonablemente sanos.