Mientras mi madre habla por teléfono conmigo, hago alguna cosita para matar el tiempo. Generalmente aprovecho y me voy a lavar los dientes; luego escucho un poco más y en determinado momento le digo "mamá, mamá!" "qué pasa" dice ellla, "no, nada, quería decirte que te quiero mucho". Y ya está.
No Isaías! es al revés, el que calla se toma el tiempo para estudiarte, pero si lo decías por mi, que soy uno de tus mejores amigos desde hace tanto tiempo, te puedo decir que no estás valorándome en su justa medida, que me usás como quien usa un carro; para transportarte de un lugar a otro y conocer gente, que siempre usaste mi nombre en tu beneficio y mi inteligencia para llevarte los aplausos. Por mí te podés ir a donde ya sabés y no me llames nunca más.
12 comentarios:
Vaya a saber uno en que piensa el que está callando.
Algunas personas se creen conversadoras y en realidad son grandes conferencistas.
Mientras mi madre habla por teléfono conmigo, hago alguna cosita para matar el tiempo. Generalmente aprovecho y me voy a lavar los dientes; luego escucho un poco más y en determinado momento le digo "mamá, mamá!" "qué pasa" dice ellla, "no, nada, quería decirte que te quiero mucho".
Y ya está.
El que calla... otorga tiempo al otro para que te estudie.
No Isaías! es al revés, el que calla se toma el tiempo para estudiarte, pero si lo decías por mi, que soy uno de tus mejores amigos desde hace tanto tiempo, te puedo decir que no estás valorándome en su justa medida, que me usás como quien usa un carro; para transportarte de un lugar a otro y conocer gente, que siempre usaste mi nombre en tu beneficio y mi inteligencia para llevarte los aplausos. Por mí te podés ir a donde ya sabés y no me llames nunca más.
Mi terapeuta debe estar muy afectado porque usa mi tiempo de terapia para él.
Esto no puede seguir así; tengo que decidir cuáles serán mis honorarios!
Prefiero hablar del tiempo antes que largar un refrán. El vecino no lo entendería.
El que está muy entusiasmado hablándote, ni siquiera se fija en tu cara de aburrimiento, sigue como locomotora sin frenos.
En casa hablamos todos y ninguno se calla.
Cuando una mujer que me gusta habla demasiado, apago el sonido y me quedo solo con la imagen.
Es más cierto esto que decir que "el que calla, otorga".
Mi perro nació callado. Por eso lo elegí.
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