viernes, 12 de septiembre de 2008

Significante Nº 183

A la muerte se le gana apostando mucho semen.

14 comentarios:

Anónimo dijo...

La muerte es nuestra inseparable compañera.

Anónimo dijo...

Yo le pongo mucho semen a mi compañera. Espero que resulte eh!

Anónimo dijo...

Me lo tomo en serio. Si uno tiene hijos es una forma de no morir.

Anónimo dijo...

La traducción de orgasmo en francés es 'pequeña muerte'. ¡Se la saben toda los franchutes!

Anónimo dijo...

...y las mujeres qué apostamos?

Anónimo dijo...

Las mujeres no apuestan porque directamente viven más años que los hombres. Sin apostar nada.

Anónimo dijo...

No sé que cosa rara me pasa que quiero perderle a la muerte.

Anónimo dijo...

Pero el semen queda en el condón y del condón va al water y de ahí a las cloacas y de ahí (si todo sale bien) a altamar.
Deberíamos encargar a experimentados buceadores que liberen la semilla y luego le acerquen redondos y orgullosos óvulos. Ustedes verán. Nacerán las sirenas más hermosas.

Anónimo dijo...

¡De ninguna manera! Me gusta arreglarme para ir al cacino y no voy a estar manipulando esa leche pegajosa!

Anónimo dijo...

¡No discrimine a los operados de próstata!

Anónimo dijo...

Mi mujer lo primero que hace es lavarse cuando le regalo mi semen.
La muerte me está ganando.

Anónimo dijo...

No me lo cambian por fichas, pero me hizo conocer cada fichas...

Anónimo dijo...

La muerte es la eterna ganadora de todos los certámenes, todas las apuestas, las ilusiones, los afanes. Ella es así. No necesita medirse ni competir.

Anónimo dijo...

Apostar semen o acostar semen o apuntar semen y mojar con semen y acariciar con semen o limpiar con semen
el alma.
No le gana a la muerte pero acaricia a la vida.