Muchos
golpeadores detienen la golpiza cuando perciben que los pedidos de perdón que
implora la víctima son realmente sinceros o cuando se les cansa el brazo.
La víctima no tiene que pedir perdón por nada. Suceda lo que suceda, nadie tiene el derecho de agarrar a golpes a otro, mucho menos si el otro es más débil.
este tipo de violencia puede llegar a solucionarse si se trabaja con la pareja. Si la única medida es alejar o apresar al golpeador, el golpeador sigue estando con las mismas posibilidades de recaer en la misma conducta, quizás con otra persona, pero la conducta no se elimina.
El golpeador es victimario y también víctima. Es víctima de reacciones que no puede controlar. No debe confundirse esto con una justificación; sucede que para eliminar el problema hay que comprender como se genera.
8 comentarios:
No me hace gracia que se bromee con este tema.
La víctima no tiene que pedir perdón por nada. Suceda lo que suceda, nadie tiene el derecho de agarrar a golpes a otro, mucho menos si el otro es más débil.
Cuando sobreviene el ataque de furia, el brazo no se cansa.
este tipo de violencia puede llegar a solucionarse si se trabaja con la pareja. Si la única medida es alejar o apresar al golpeador, el golpeador sigue estando con las mismas posibilidades de recaer en la misma conducta, quizás con otra persona, pero la conducta no se elimina.
El golpeador es victimario y también víctima. Es víctima de reacciones que no puede controlar. No debe confundirse esto con una justificación; sucede que para eliminar el problema hay que comprender como se genera.
Existen enfermos incurables; son aquellos que padecen enfermedades incurables. Habría que aceptarlo.
Para las enfermedades incurables se buscan medicamentos, vacunas, tratamientos. ¿Por qué en este caso no?
Muchos golpeadores detienen la golpiza cuando los golpea alguien más fuerte.
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