Me consta que en el afán de ser breve y concreto, a veces incurro en exageraciones o en aseveración demasiado drásticas, pero éstas son los daños colaterales de un bien mayor: Que la lectura no sea pesada y poco clara.Aplicando lo dicho en el párrafo anterior, pienso que no estaría mal suponer que los héroes creados por Cervantes hoy son dos, dependiendo de la ideología desde la que se mire.
Para el socialismo el héroe es Don Quijote, mientras que para el capitalismo es Sancho.
Estos dos personajes representan el espíritu y la materia respectivamente, al igual que el socialismo y el capitalismo también lo hacen pero en otro plano.
Hay una tercera posición: Cuando el socialismo accede al gobierno, aplica criterios capitalistas acomodando el discurso socialista para disimular la incoherencia.
Continuando con la comparación, hoy tenemos a un Sancho ligeramente solidario y que se lleva bien con los intelectuales.
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13 comentarios:
Si analizaramos la obra de Cervantes con otros ojos se podría apreciar que posee un doble sentido, una doble lectura dirigida a dos públicos completamente distintos.
Está elaborada en claves que guardan en sí sabiduría,
para quienes deseen descubrirla.
Es un desafío lograrlo.
El quijote era un gil y un boludo.
Los tiempos cambian y la literatura acompaña.
Hoy tenemos a un Sancho representado genialmente por un Homero Simpson
Me parece que el socialismo una vez instalado necesita de Sanchos (pero claro, antes, para instalarse, precisó de Quijotes)
¿En dónde tenemos hoy un Sancho? ¿A qué porción de los hispano parlantes se está refiriendo?
Sancho y el Quijote son las dos caras de la misma moneda.
Qué curioso lo que ud. plantea, porque en realidad los socialistas se dicen materialistas y los capitalistas idealistas. ¡Ya no sé cuál votaré de estas listas!
El mundo está pensado como para permitir únicamente solidaridades ligeras.
En el dibujo, Sancho parece un cura que pacientemente escucha los devaríos de un ser atormentado.
PARA EL SOCIALISMO, HÉROE ES EL PUEBLO.
Cuando los capitalistas acceden al gobierno (casi todo el tiempo, lamentablemente) aplican criterios selváticos.
Por qué el espíritu tiene que estar tan mal alimentado?!
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