El Paraíso y el Infierno nos estimulan en la vida terrena. Muchos caemos en la trampa de creer que existe un paraíso perfecto, en el que todo nos va a salir bien; creemos que el paraíso existe y para llegar a él sólo necesitamos esforzarnos. Del mismo modo le tememos a un infierno que quizás sea más terrorífico en nuestra imaginación que en la realidad. Aunque creo que con la posibilidad de infierno nos equivocamos menos.
Mi familia es muy ahorrativa. No nos gusta desperdiciar energía usando aire acondicionado y esas cosas. En invierno nos mudamos al Infierno y en verano pasamos las vacaciones en el Paraíso.
10 comentarios:
Del Paraíso y del Infierno nadie está demasiado creído.
Los niños sí pueden llegar a creerlo Luján, y no me parece para nada pedagógico.
Tenemos pajaritos debajo de la piel, que con sus cantos no nos permiten escuchar las estupideces.
La Biblia no puede tomarse en sentido literal. Todo está dicho en sentido metafórico. La Biblia es un sagrado conjunto de relatos poéticos.
A mí lo único que me estimula son los arañazos de mi negra.
El Paraíso y el Infierno nos estimulan en la vida terrena. Muchos caemos en la trampa de creer que existe un paraíso perfecto, en el que todo nos va a salir bien; creemos que el paraíso existe y para llegar a él sólo necesitamos esforzarnos. Del mismo modo le tememos a un infierno que quizás sea más terrorífico en nuestra imaginación que en la realidad. Aunque creo que con la posibilidad de infierno nos equivocamos menos.
Nuestra moral es muy camaleónica.
La moral de los humanos tiene piel gruesa porque ya está curtida de tanta falta de respeto.
Mi familia es muy ahorrativa. No nos gusta desperdiciar energía usando aire acondicionado y esas cosas. En invierno nos mudamos al Infierno y en verano pasamos las vacaciones en el Paraíso.
Lo más importante es que la moral tenga una piel que la proteja de las exigencias sobrenaturales.
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