Un caballo desbocado sólo se detiene cuando se cansa. Mientras tanto el jinete puede hacer algunas llamadas, responder mails o limarse las uñas.
10 comentarios:
Pepe y Braulio
dijo...
"Caballo le dan sabana porque está viejo y cansado pero no se dan de cuenta que un corazón amarrado cuando le sueltan las riendas es caballo desbocado"
Si el caballo se libera, uno tiene que sujetar bien fuerte las riendas. Donde se distraiga, esa bestia inconsciente se lo lleva pal bañado. No vaya a ser que se purifique...
Cuándo se cansa un caballo desbocado? Porque a veces parece que se está cansando y algo pasa que lo reaviva. De pronto le viene un viento que le prende la brasa. Pero no es como el amor que hubo, que con cenizas queda. Mas bien que las cenizas son como un mísero recuerdo gris de lo que fue el combustible.
-Cuando te pones así quisiera que no te cansaras nunca. -Nunca me voy a cansar de vos. -Ay! para! cambiemos de posición porque me estás partiendo la cadera. -Y yo si sigo así, en figa que me agarro el lumbago.
10 comentarios:
"Caballo le dan sabana porque está viejo y cansado
pero no se dan de cuenta que un corazón amarrado
cuando le sueltan las riendas es caballo desbocado"
Cuando la mujer no tiene interés, uno le da y le da, pero ella sigue en otra.
Si se da manija, grita insulta, despotrica, pues bien, espera a que se calme e intenta hablar otro día.
Después de toda esa locura, te viene una gran depresión.
El que parececía un caballo desbocado fue el Nolo, cuando lo echaron de Boca.
Si el caballo se libera, uno tiene que sujetar bien fuerte las riendas. Donde se distraiga, esa bestia inconsciente se lo lleva pal bañado.
No vaya a ser que se purifique...
A veces las yeguas desbocadas tienen ese qué se yo...
el día que me canse
la rosa que engalana
decorará tu féretro
con páaalido color
Cuándo se cansa un caballo desbocado? Porque a veces parece que se está cansando y algo pasa que lo reaviva. De pronto le viene un viento que le prende la brasa. Pero no es como el amor que hubo, que con cenizas queda. Mas bien que las cenizas son como un mísero recuerdo gris de lo que fue el combustible.
-Cuando te pones así quisiera que no te cansaras nunca.
-Nunca me voy a cansar de vos.
-Ay! para! cambiemos de posición porque me estás partiendo la cadera.
-Y yo si sigo así, en figa que me agarro el lumbago.
Publicar un comentario